Hace poco se publicó la guía europea de diagnóstico y tratamiento de insomnio. Las recomendaciones señalan emplear los criterios diagnósticos como la dificultad para iniciar y/o mantener el sueño, despertarse antes de lo deseado, resistencia a acostarse en horario adecuado, entre otros. El abordaje inicial incluye anamnesis, examen físico, historial de sueño, actigrafía y polisomnografía. El tratamiento incluye enfoque farmacológico (benzodiazepinas, antidepresivos, hipnóticos) y no farmacológico (terapia cognitivo-conductual).

Medicina Interna