Existe un creciente número de casos de infección respiratoria aguda en niños, que está saturando los servicios de urgencias alrededor del mundo. Se trata de la coexistencia de influenza, virus sincitial respiratorio (VRS) y COVID-19. La mayoría cursan cuadros respiratorios leves; sin embargo, en pacientes con sistemas inmunológicos débiles, se pueden presentar casos más severos. El aislamiento secundario a la pandemia por COVID-19 sería el responsable de esta “tripledemia”.

En las últimas semanas se ha reportado un aumento en el número de casos de infección respiratoria aguda en niños alrededor del mundo. Se ha documentado la coexistencia de COVID-19, con virus sincitial respiratorio (VRS) e influenza.1,2Según la Organización Panamericana de la Salud, los más afectados son Estados Unidos, Argentina, Chile, Uruguay y el sur de Brasil. 1Los tres virus tienen síntomas parecidos: fiebre, rinorrea, tos, cefalea y odinofagia. Generalmente causan cuadros leves, sin embargo, pacientes con sistemas inmunes deprimidos, bebés y ancianos pueden desarrollar enfermedades respiratorias graves. 1Lo que es cierto es que la coexistencia de estos tres virus puede sacudir los sistemas de salud y llevarlos al colapso, sin mencionar los costos derivados del ausentismo laboral masivo por esta causa. 1Según reportes de los CDC, se están alcanzando los niveles máximos estacionales de VRS, a lo que se suma la influenza, en lo que se considera la peor temporada otoñal de esta enfermedad desde la pandemia de gripe porcina en 2009.1,2Lo realmente alarmante es que estos virus estacionales se adelantaron por varias semanas. Por ejemplo, la influenza arribó seis semanas antes de lo habitual y hasta mediados de octubre ya era responsable de 6.900 hospitalizaciones y 360 muertes en Estados Unidos. Pero el fenómeno es aún más sorpresivo en el cono sur, donde en el verano se han documentado dos variantes simultáneas de la gripe porcina: H3N2 y H1N1. 1,2Factores como la cuarentena secundaria a la pandemia por COVID-19 favorecieron una baja inmunológica en la población, sobre todo en población pediátrica, que gracias a las medidas de aislamiento no plantearon el reto habitual a su sistema inmunológico y provocaron los múltiples cuadros respiratorios actuales.1,2Sin embargo, cabe preguntarse, ¿puede hablarse de una tripledemia? No podemos olvidar que la detección de virus en mucosa nasal por pruebas moleculares no es sinónimo de infección activa, y que estos virus pueden estar en la mucosa nasal varios meses después de la infección aguda. Luego queda la incógnita de si es la coexistencia de los tres virus lo que causa este aumento tan abrupto en el número de casos de infección respiratoria aguda. <h4>Comentario editorial</h4>Los virus respiratorios estacionales han sacudido los sistemas de salud por décadas. Hablar de la “tripledemia” es importante a la hora de explicar la razón detrás del aumento significativo de cuadros respiratorios en los niños. Habitualmente se hablaba de picos respiratorios, pero la persistencia de estos cuadros por varios meses hace pensar en una meseta respiratoria que poco a poco ha menguado los recursos de los sistemas de salud. Es deber del galeno identificar a los pacientes con alto riesgo de presentar complicaciones para atenderlos de forma oportuna y evitar muertes por esta causa.

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¿Tripledemia?, múltiples virus respiratorios en los niños

“Tripledemia”: coexistencia de COVID-19, virus sincitial respiratorio e influenza alrededor del mundo. Entérese aquí. 