A nivel mundial, la isquemia cerebral representa el 62%, la hemorragia intracerebral el 28% y la hemorragia subaracnoidea el 10% de todos los accidentes cerebrovasculares, lo que refleja una mayor incidencia de accidentes cerebrovasculares (ACV) hemorrágicos en países de ingresos bajos y medianos. Para los pacientes con accidente cerebrovascular isquémico, el uso de tenecteplasa (TNK) para la trombólisis se asocia con una tasa más baja de hemorragia intracraneal sintomática (HICS) que la alteplasa (ALT).

Los investigadores compararon las tasas de HICS en pacientes con ACV isquémico tratados con TNK o ALT utilizando datos de un registro internacional multicéntrico. Se incluyeron datos de 7891 pacientes de hospitales de Nueva Zelanda, Australia y Estados Unidos. Los pacientes que recibieron TNK eran mayores, con una mayor proporción de varones, tenían puntajes más altos en la escala de accidente cerebrovascular de los Institutos Nacionales de Salud y se sometieron a trombectomía mecánica con más frecuencia.  Los investigadores encontraron que la tasa de HICS fue de 3.71% y 2.13% para ALT y TNK, respectivamente (odds ratio ajustado, 0.49; intervalo de confianza (IC) del 95%, 0.31 a 0.76; p = 0.002). Para los pacientes que no se sometieron a trombectomía, la tasa de HICS fue del 3.00% y del 1.74% para ALT y TNK, respectivamente (odds ratio ajustado, 0.48; IC 95%, 0.27 a 0.87; p = 0.016). La tasa de HICS fue 6.80 y 2.80 para ALT y TNK, respectivamente, para los casos tratados con trombectomía (odds ratio ajustado, 0.60; IC 95%, 0.31 a 1.16; p = 0.129). Según los autores de este estudio clínico, las tasas significativamente más bajas de HICS fueron una sorpresa. Este hallazgo de que tenecteplasa tiene aproximadamente la mitad del riesgo de HICS en comparación con alteplasa en la práctica clínica de rutina, brinda tranquilidad de que tenecteplasa tiene menos probabilidades de producir hemorragia cuando se usa de forma rutinaria para el tratamiento del ACV isquémico. Los resultados de este estudio clínico observacional retrospectivo no pueden probar una relación de causa y efecto entre el tipo de anticoagulante utilizado y el riesgo de hemorragia intracraneal. Además, los clínicos que valoran a los pacientes conocían los tratamientos recibidos, lo que puede introducir sesgos en los resultados. Aunque muchos más pacientes recibieron alteplasa, el análisis se ajustó a este desequilibrio. Comentario editorialEs importante realizar ensayos clínicos y estudios de vida real en poblaciones de pacientes diversas con el fin de confirmar estos resultados.

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Menor Riesgo de Sangrado con Tenecteplasa para el Accidente Cerebrovascular Isquémico

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