Más de 300 000 muertes cada año en los Estados Unidos se atribuyen a la enfermedad cardiovascular aterosclerótica (ASCVD, por sus siglas en inglés). La estratificación del riesgo tiene por objeto adaptar la intensidad de las medidas terapéuticas o preventivas al riesgo del paciente y es complementaria del enfoque poblacional, por lo que la atención primaria es clave. Un estudio publicado en JAMA Network Open demostró un uso significativamente bajo de las estrategias de prevención secundaria (estilos de vida y prescripción de estatinas y aspirina), en especial en mujeres y afrodescendientes.

La ASCVD comprende un grupo de trastornos que representan las principales causas de morbilidad, muerte prematura y reducción de la calidad de vida en todo el mundo.1, 2 Más de 300 000 muertes anuales en los EE. UU. se atribuyen a la ASCVD.1 Además, estos pacientes enfrentan costos extremadamente altos de atención médica debido a un tratamiento subóptimo y una elevada carga de enfermedad.1<h3>La atención primaria es clave</h3>Varios estudios corroboran el impacto positivo de la atención primaria como escenario ideal para identificar a los pacientes en riesgo.2 La estratificación del riesgo tiene por objeto adaptar la intensidad de las medidas terapéuticas o preventivas del riesgo del paciente y es complementaria del enfoque poblacional, que involucra estrategias colectivas, independientes del riesgo individual.2 Existen puntajes simples y factibles para predecir el riesgo ASCVD, incluso desde la juventud.3En 2013, se publicó la “Guía sobre el tratamiento del colesterol en sangre para reducir el riesgo cardiovascular en adultos” <a href="https://www.docred.com/guias/guia-medica-recomendaciones-sobre-prevencion-cardiovascular-aha-2022" target="_self">del Colegio Estadounidense de Cardiología y la Asociación Estadounidense del Corazón (ACC/AHA)</a>, que sirve como estándar para la prevención secundaria de ASCVD.1 Sin embargo, algunos análisis de gastos médicos para monitorear tendencias en la terapia con estatinas y la asesoría sobre estilos de vida, han documentado ajustes insignificantes entre los grupos de alto riesgo.1<h3>La noticia</h3>Un estudio transversal publicado en JAMA Network Open que utilizó datos de consultas en adultos con ASCVD entre 2006 y 2016, demostró una infrautilización significativa de las estrategias de prevención secundaria.1 La prescripción de estatinas, aspirina y el <a href="https://www.docred.com/noticias/noticia-medica-control-estres-reduce-riesgo-acv" target="_self">acompañamiento en hábitos saludables</a> permanecieron bajos en los grupos de alto riesgo, con aumentos muy modestos en la prescripción de los dos medicamentos.1 Aunque hubo mejoras en las diferencias de género y etnia, especialmente después de 2013, la prevención secundaria fue más baja en mujeres y afrodescendientes.1<h3>Utilidad clínica</h3><a href="https://www.docred.com/articulos/articulo-medico-cuando-descontinuar-estatinas-adulto-mayor" target="_self">La prescripción de estatinas y aspirina</a> se ha establecido durante mucho tiempo para la prevención primaria y secundaria de enfermedades cardiovasculares. Sin embargo, su uso sigue siendo bajo.1 La atención primaria ofrece una oportunidad clave para ampliar esta prescripción en pacientes de alto riesgo.1 El asesoramiento sobre estilos de vida también es un tratamiento hipolipemiante y cardioprotector de larga data, pero sigue siendo infrautilizado.1Este estudio destaca la persistencia de brechas raciales y de género en estos abordajes entre pacientes con ASCVD en entornos de atención primaria, resultado quizá de cambios frecuentes en las políticas nacionales y menos programas enfocados en la implementación.1<h3>En perspectiva</h3>La disminución en el tiempo de la consulta médica y la falta de entrenamiento clínico en nutrición, actividad física y cambio de hábitos nocivos, se han identificado como barreras en el entorno de atención primaria.1 Más programas que se centren en la aplicación de pautas a los pacientes, recordatorios de registros médicos electrónicos y evaluación de la resistencia del paciente de forma rutinaria en la consulta médica, ayudarían a mitigar algunas de las barreras para aumentar el uso de estas estrategias de prevención secundaria.1<figure class="poll" data-id="454">{ Poll ID: 454}</figure>Comentario editorialEs urgente mejorar la calidad y los programas de implementación en el escenario de la atención primaria para abordar algunas de las brechas para la prevención secundaria de ASCVD. Aunque se requiere un cambio de paradigma desde los tomadores de decisiones y las políticas públicas, el médico de atención primaria desempeña un papel esencial en este proceso.

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Varios estudios de gastos médicos han documentado que los ajustes de la terapia en estos pacientes son insignificantes. Ingrese y lea la noticia completa.