La mayoría de formas de anticonceptivos orales (AO) contienen etinilestradiol y progestina, compuestos sintéticos que imitan hormonas naturales. Si bien el objetivo principal del tratamiento es influir en los órganos reproductivos, los receptores de estrógeno y progesterona se distribuyen por todo el cuerpo, lo cual sugiere que estos fármacos median en muchos procesos fisiológicos. Cierta evidencia indica que los AO afectan el estado de ánimo de algunas mujeres al punto de producir un episodio depresivo. Sin embargo, este vínculo no ha sido abordado adecuadamente.

Se estima que, en todo el mundo, más de 150 millones de mujeres en edad reproductiva utilizan AO,1, 2 y muchas de ellas se benefician en términos de evitar abortos y embarazos no deseados, así como el sangrado menstrual y la dismenorrea.1 La mayoría de AO contienen etinilestradiol y progestina, hormonas sintéticas que imitan a la naturales, estrógeno y progesterona, respectivamente.2Si bien el objetivo principal del <a href="https://www.docred.com/videos/vi-anticoncepcion-emergencia-estamos-listos-superar-obstaculos-habla-editor" target="_self">tratamiento con AO es influir en los órganos reproductivos</a>, los receptores de estrógeno y progesterona se distribuyen por todo el cuerpo,2 lo cual sugiere que estos fármacos median en muchos procesos fisiológicos, varios de ellos cerebrales, como la atención.2 Sin embargo, la evidencia de que las usuarias de AO tienen habilidades de atención más pobres que quienes no los usan, es insuficiente.2<h4>Anticoncepción hormonal y depresión</h4>Las mujeres tienen casi el doble de probabilidad de desarrollar episodios depresivos en comparación con los hombres.1, 3 Esta brecha entre sexos comienza durante la adolescencia, que coincide con la menarquia en las niñas, y puede durar hasta la menopausia.3Cierta evidencia clínica indica que los AO pueden afectar el estado de ánimo de algunas mujeres al punto de producir un episodio depresivo;1, 3 no obstante, el vínculo entre el uso de AO y la depresión sigue sin abordarse adecuadamente.1Varios estudios han identificado una asociación entre el uso de AO durante la adolescencia y un mayor riesgo de depresión.1 En mujeres adultas, los efectos de la anticoncepción hormonal sobre el riesgo de depresión son menos claros, y algunos autores sugieren que no aumentan ni disminuyen.1<h3>La noticia</h3>Científicos del Departamento de Inmunología, Genética y Patología, de la Universidad de Uppsala, en Suecia, publicaron un estudio que incluyó a 264 557 mujeres, en el que demostraron que el uso de AO se asocia con un mayor riesgo de depresión poco después del inicio.1 Este riesgo disminuyó con el uso continuo, pero el riesgo de por vida permaneció significativamente aumentado.1Estos hallazgos podrían explicarse por la <a href="https://www.docred.com/eventos/ev-taller-anticoncepcion-todo-medico-debe-saber" target="_self">fluctuación hormonal inducida por el inicio de los AO</a>, que puede afectar a mujeres particularmente sensibles a los cambios en los niveles de hormonas y sus metabolitos, como la alopregnanolona.1 Tales fluctuaciones podrían alterar la regulación GABAérgica del hipotálamo-hipófisis-suprarrenal en este grupo de mujeres.1<h3>Utilidad clínica</h3>En consonancia con análisis previos, los resultados del estudio sugieren que el riesgo de depresión aumenta no solo entre las adolescentes que inician los AO, sino también entre las mujeres mayores de 20 años.1 Sin embargo, los autores encontraron que las mujeres que usaron AO durante la adolescencia permanecieron con riesgo aumentado incluso después de descontinuarlos, situación que no fue evidente entre las usuarias adultas.1Por ende, se ha planteado la hipótesis de que el aumento del riesgo entre quienes usaron AO durante la adolescencia puede atribuirse a una mayor susceptibilidad a las hormonas gonadales, incluida la anticoncepción hormonal, durante periodos cruciales de desarrollo, lo cual afectaría la organización de las estructuras cerebrales y conduciría a cambios duraderos en este sentido.1Dentro de las mujeres que experimentan episodios depresivos asociados con transiciones hormonales puede existir un subgrupo sensible a las hormonas dentro de la <a href="https://www.docred.com/articulos/anticonceptivos-trastornos-psiquiatricos" target="_self">amplia categoría diagnóstica del trastorno depresivo mayor</a>.3 La investigación futura debe evaluar la influencia de los AO en otros factores cognitivos con más y mejores estudios, considerando los diferentes riesgos de sesgo.2<figure class="poll" data-id="680">{ Poll ID: 680}</figure>Comentario editorialSe debe poner enfasis en que la mayoría de las mujeres toleran bien los AO sin experimentar efectos en el estado de ánimo, lo que los convierte en una excelente opción. Sin embargo, es necesario educar a las usuarias, estimar el riesgo de depresión, informar a los profesionales de atención primaria sobre la relación de los AO con esta condición y realizar más investigaciones para determinar la causa de la depresión cuando es precipitada por la anticoncepción hormonal.

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Mayor riesgo de depresión asociado a los anticonceptivos orales

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