Controlar los desencadenantes y modificar el estilo de vida parece indispensable para el tratamiento de la migraña y esto es independiente de la terapia farmacológica. Según varias revisiones, se cree que prescribir una dieta de bajo índice glucémico, al atenuar el estado proinflamatorio, puede ser prometedor en este sentido. Históricamente, una alta prevalencia de rasgos como la resistencia a la insulina, hiperinsulinemia, hipoglucemia, hiperglucemia y diabetes mellitus tipo 2 se asocia con cefalea y migraña; sin embargo, un volumen considerable de evidencia resulta contradictorio.

La migraña es un trastorno neurológico que afecta a cerca del 15% de la población mundial, según los informes de carga global de cefalea de 2016; de hecho, fue descrita por primera vez en 1935 como un "dolor de cabeza hipoglucémico".1-3 Ha sido clasificada como el factor que más contribuye a la discapacidad en menores de 50 años en todo el mundo.3Independiente del tratamiento indicado, controlar los desencadenantes y modificar el estilo de vida es indispensable para el abordaje exitoso de la migraña.3 Según varias revisiones, las intervenciones nutricionales pueden resultar efectivas en el control de los síntomas,3 y se podría especular que prescribir una dieta de bajo índice glucémico, al atenuar el estado proinflamatorio, puede ser prometedor.3<h3>Rasgos glucémicos y migraña</h3>El conocimiento sobre los mecanismos fisiopatológicos de la migraña debe integrarse en un enfoque de tratamiento multimodal para mejorar la calidad de vida de los pacientes.3 Una alta prevalencia de rasgos como la resistencia a la insulina, hiperinsulinemia, hipoglucemia, hiperglucemia y diabetes mellitus tipo 2 se asocia con cefalea y migraña, lo que, junto con el mayor riesgo de enfermedad cardiovascular, contribuye significativamente a una esperanza de vida más corta.1Además, varios estudios han investigado la relación entre la migraña y los rasgos glucémicos, <a href="https://www.docred.com/guias/guia-medica-tratamiento-hiperglucemia-2022" target="_self">centrándose en la desregulación de la glucosa (o disglucemia)</a> en pacientes con migraña, principalmente debido al metabolismo alterado de la relación glucosa-insulina.1 La disglucemia puede tener un papel en la etiología de estos trastornos de cefalea, dada la importancia de sus efectos sistémicos; sin embargo, a veces se pasa por alto el rol de la disglucemia en el cerebro.1, 2Algunos investigadores se han enfocado en los efectos de modulación farmacológica del área tegmental ventral y los niveles glucémicos consiguientes, que podrían estar involucrados, por ejemplo, en los cambios de apetito en pacientes susceptibles a migraña,2 pero estos estudios que investigaron la relación entre la glucosa en ayunas, la insulina en ayunas y la tolerancia a la glucosa con el riesgo de migraña, produjeron hallazgos contradictorios.1<h3>La noticia</h3>Un estudio de rasgos cruzados en todo el genoma, realizado por científicos del Laboratorio de Epidemiología Genómica de la Universidad Tecnológica de Queensland, en Brisbane, Australia, exploró la base genética compartida entre la migraña y los rasgos glucémicos.1 Los autores descubrieron una correlación significativa entre la migraña y cinco rasgos glucémicos (glucosa a las dos horas, insulina en ayunas, proinsulina en ayunas, diabetes mellitus tipo 1 y hemoglobina glicosilada [HbA1c]).1Se encontraron ocho y doce regiones genómicas que contenían efectos pleiotrópicos significativos entre la migraña y los rasgos glucémicos, y en general la cefalea y los rasgos glucémicos, respectivamente.1 El análisis aleatorizado indicó, además, <a href="https://www.docred.com/casos/ca-inflamacion-resistencia-insulina-mujer-obesa-diabetes-gestacional" target="_self">un aparente papel causal de la proinsulina en ayunas</a> en la prevención de la cefalea.1 Estos hallazgos ofrecen nueva evidencia y son consistentes con otros estudios observacionales publicados en esta materia.1<h3>Utilidad clínica</h3>Los resultados de esta investigación respaldan la hipótesis de que una predisposición genética a la proinsulina en ayunas podría reducir el riesgo de padecer trastornos de cefalea.1 Aunque los mecanismos fisiopatológicos que pueden subyacer a este efecto protector no se conocen del todo, se ha identificado que la proinsulina activa vías neuroprotectoras en el hipocampo y desencadena una cascada de señalización que reduce la reactividad de astrocitos y biomarcadores neuroinflamatorios.1Todos estos mecanismos han sido involucrados en la patogenia de la migraña, la cefalea y otras afecciones neurológicas.1 Sin embargo, se requiere más investigación para comprender la función de los genes compartidos con sus <a href="https://www.docred.com/articulos/biomarcadores-diagnostico-migrana" target="_self">supuestas interacciones moleculares en el desarrollo de la migraña</a>,1 y para determinar qué función específica de la proinsulina puede reducir el riesgo de cefalea.1 Descifrar los mecanismos moleculares detrás de este efecto protector debería ser prioridad para la comunidad científica.1<figure class="poll" data-id="608">{ Poll ID: 608}</figure>Comentario editorialSegún estudios anteriores, existe una relación entre los desequilibrios metabólicos, el estrés oxidativo y la epigenética con la cefalea, que parece respaldar la participación potencial de estas vías en la comorbilidad de la migraña y algunos rasgos glucémicos. La evidencia actual proporciona una mejor comprensión de esta relación, al identificar la correlación genética y los loci y genes compartidos, e inferir una posible asociación causal.

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Relación entre glucemia y migraña: nuevas perspectivas

La evidencia actual respalda una aparente base genética común entre la cefalea y ciertos rasgos glucémicos. Lea acá la noticia completa.