La diabetes mellitus ha sido reconocida como factor de riesgo para desarrollar deterioro cognitivo progresivo con potencial de convertirse en demencia. Es importante iniciar un adecuado abordaje diagnóstico y terapéutico en el paciente de edad avanzada con diabetes mellitus y algún signo de deterioro mental. Las tiazolinedionas y otras moléculas cuya diana son los receptores activados por el proliferador de peroxisomas (PPAR, por sus siglas en inglés), especialmente los PPAR-gama, parecen prometedores en la prevención y manejo de estas condiciones mentales.

<h3>Diabetes mellitus y demencia</h3>La demencia es un trastorno neurodegenerativo que en 2015 sufrieron 55 millones de personas en el mundo y que aumenta en casi 10 millones de casos/año.1 La diabetes mellitus (DM) afecta a todos los grupos de edad, tiene una prevalencia mayor (12 a 25%) en pacientes de edad avanzada y parece ser un factor de riesgo para el desarrollo de <a href="https://www.docred.com/articulos/articulo-medico-tratamiento-de-ansiedad-depresion-diabetes" target="_self">deterioro cognitivo progresivo</a>.2 La fisiopatología detrás de esta relación implica resistencia a la insulina, hiperglucemia, neuroinflamación y homeostasis energética alterada.1Varios estudios señalan que las personas con DM tienen una probabilidad de presentar deterioro cognitivo leve y demencia superior a 1.5 veces,2 incluidos sus dos subtipos principales, la enfermedad de Alzheimer (EA) y la demencia vascular (DV).1 Estos escenarios contribuyen a que el paciente sea más frágil y requiera más cuidados para realizar actividades cotidianas, impactando la calidad de vida.2 El riesgo de desarrollar estas condiciones parece ser mayor en pacientes con DM, edad avanzada y antecedente de hipoglucemias graves durante estancia hospitalaria o en manejo ambulatorio.2<h3>La noticia</h3>Existen algunas investigaciones sobre el uso de medicamentos antidiabéticos para la prevención y el tratamiento de la demencia (especialmente la EA).1 Se ha considerado que la vía de señalización de la insulina es el objetivo de las estrategias terapéuticas para disminuir las alteraciones asociadas con el deterioro cognitivo.2 Varios estudios han indicado que los receptores PPAR desempeñan un papel importante en la disminución de la inflamación, el estrés oxidativo, la amiloidogénesis y el hipotiroidismo, y en la mejora de la neurogénesis, la plasticidad sináptica y la función mitocondrial.3Científicos de la Universidad de Arizona en Estados Unidos encontraron que la monoterapia con tiazolinedionas se asocia con mayores reducciones en el riesgo de demencia por todas las causas en comparación con otros medicamentos administrados a pacientes con DM.1 El uso de tiazolinedionas combinadas con otro medicamento antidiabético mostró un menor riesgo de demencia por cualquier causa que la monoterapia con metformina, por ejemplo.1Las enfermedades vasculares aumentan el riesgo de EA, por lo que la reducción de DV asociada a las tiazolinedionas también puede reducir el desarrollo del Alzheimer.1 Los análisis de subgrupos muestran que los participantes de hasta 75 años se beneficiaron más que los participantes mayores, lo que destaca la dificultad de intervenir en etapas más avanzadas de la enfermedad y la importancia de la prevención temprana de la demencia.1El uso de tiazolinedionas también pareció ser más protector en participantes con <a href="https://www.docred.com/guias/guia-medica-abordaje-tratamiento-obesidad-nice-2022" target="_self">sobrepeso u obesidad</a>. Esto puede deberse a que reducen la obesidad central, un factor de riesgo reconocido para demencia.1Otros estudios han demostrado que ciertas formulaciones de pioglitazona pueden cruzar la barrera hematoencefálica y mejorar la respuesta de los receptores de insulina, regular el metabolismo de la glucosa en el cerebro y reducir la neuroinflamación.3 Se ha demostrado que esto produce una mejora en el deterioro cognitivo causado por la EA, así como en la supervivencia neuronal dopaminérgica en el cerebro.3<h3>Expectativas</h3>Se requieren estudios entre poblaciones más diversas para confirmar los hallazgos a favor de las tiazolinedionas.1 Más investigaciones sobre los mecanismos de acción ayudarán a establecer el potencial de estas moléculas en términos de su aplicabilidad clínica en el tratamiento de los trastornos cognitivos.3Comentario editorialPuede resultar valioso reconocer el papel de algunos medicamentos antidiabéticos en la prevención y el tratamiento de algunas complicaciones asociadas a la diabetes mellitus, más allá de lo que implican la glicemia, el síndrome cardiometabólico y sus metas terapéuticas. El deterioro cognitivo es un reto para los médicos tratantes que inicia desde la correcta identificación y abordaje. ¿Qué opina al respecto?

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