La Asociación Americana de Gastroenterología (AGA) brinda recomendaciones sobre el uso de terapias basadas en microbiota fecal para el tratamiento de enfermedades gastrointestinales como infecciones recurrentes, graves o fulminantes por Clostridium difficile, enfermedades inflamatorias intestinales, como la colitis ulcerosa, la enfermedad de Crohn, y el síndrome de intestino irritable. Estas terapias incluyen tanto el trasplante de microbiota fecal convencional como la microbiota fecal live y las esporas de esta microbiota.1,2

¿Qué es la microbiota fecal?Se refiere al conjunto de microorganismos, principalmente bacterias, que habitan en el intestino humano. Estos microorganismos desempeñan un papel crucial en la salud digestiva y general, participando en la digestión de alimentos, la producción de vitaminas, la regulación del sistema inmunológico, y la protección contra patógenos.1¿Cuál es el uso de la microbiota fecal en enfermedades gastrointestinales?La microbiota fecal ha cobrado importancia en el tratamiento de diversas enfermedades gastrointestinales, principalmente a través del trasplante de microbiota fecal (TMF). Este procedimiento implica la transferencia de microbiota fecal de un donante sano a un paciente con una alteración en su microbiota intestinal. El objetivo es restaurar un equilibrio saludable de microorganismos en el intestino del paciente.1<figure class="image"><img src="https://res.cloudinary.com/docred/image/upload/t_optimization/v1724702527/Guia_AGA_2024_microbiota_fecal_y_su_papel_en_el_tratamiento_de_enfermedades_gastrointestinales_GRAF_07a0f9ffde.webp" /></figure>La microbiota fecal y su manipulación a través del TMF representan un enfoque innovador en la medicina gastrointestinal, con un potencial significativo para tratar y prevenir diversas enfermedades relacionadas con la disbiosis intestinal.2¿Cuál son las terapias actualmente aprobadas basadas en microbiota fecal?Las terapias basadas en microbiota fecal son comúnmente conocidas como trasplante de microbiota fecal (TMF). Se trata de tratamientos aprobados y se utilizan principalmente para ciertas infecciones recurrentes. A continuación se detallan algunas de sus características.21. Trasplante de microbiota fecal convencional: este es el método más común y tradicional de TMF, en el cual se utiliza una suspensión de heces de un donante sano para ser introducida en el tracto gastrointestinal del receptor, por vía oral, colonoscopia, enema o sonda nasogástrica. Las muestras se preparan para asegurar que contengan una cantidad significativa de bacterias vivas que puedan colonizar el intestino del receptor. 22. Microbiota fecal, Live-JSLM: este es un producto específico basado en microbiota fecal que contiene microorganismos vivos. El término Live-JSLM se refiere a una formulación desarrollada para contener una comunidad microbiana bien caracterizada, derivada de heces humanas, con el objetivo de ser utilizada en trasplantes de microbiota fecal. Este tipo de producto suele estar estandarizado en términos de su contenido bacteriano para asegurar la eficacia y seguridad en el tratamiento de desbalances microbiológicos.23. Esporas de microbiota fecal, Live-BRPK: consiste en esporas bacterianas derivadas de microbiota fecal. Las esporas son formas resistentes de bacterias que pueden sobrevivir en condiciones adversas y reactivarse cuando se encuentran en un ambiente favorable, como el intestino del receptor. Live-BRPK indica que estas esporas están vivas y que el producto está diseñado para introducir una comunidad bacteriana resistente en el intestino del receptor. Esta formulación puede ser útil en situaciones donde se requiere mayor resistencia de las bacterias a las condiciones del tracto gastrointestinal durante la administración.2Estos productos y métodos representan diferentes enfoques en la administración de microbiota, con variaciones en la forma de las bacterias (vivas, en esporas) y la especificidad de los productos en cuanto a su contenido microbiano.2Principales recomendaciones para el uso de terapias basadas en microbiota fecal<ol><li>Uso en adultos inmunocompetentes con infección recurrente por C. difficile:</li></ol><ul><li>La AGA sugiere el uso de terapias basadas en microbiota fecal tras completar el tratamiento antibiótico estándar en adultos inmunocompetentes con infección recurrente por C. difficile. Estas terapias se consideran para prevenir la recurrencia de la infección, no para tratar la infección.2,3</li><li>Se recomienda especialmente en pacientes que han tenido dos o más recurrencias de infección por C. difficile o en aquellos con alto riesgo de recurrencia o complicaciones graves. La administración debe realizarse preferiblemente 1-3 días después de suspender los antibióticos.2,3</li></ul><ol><li>Uso en adultos con inmunodeficiencia leve o moderada con infección recurrente por C. difficile:</li></ol><ul><li>En adultos con inmunodeficiencia leve o modera la AGA también sugiere el uso de TMF convencional tras el tratamiento antibiótico estándar. Sin embargo, la evidencia es de muy baja certeza. En pacientes severamente inmunocomprometidos, se recomienda no utilizar terapias basadas en microbiota fecal debido al riesgo incrementado de infecciones graves o potencialmente mortales.2,3</li><li>Para adultos hospitalizados por infección grave o fulminante por C. difficileque no responden a los antibióticos, se recomienda el uso de TMF convencional. Esta recomendación es condicional y se basa en evidencia de muy baja certeza. El TMF debe considerarse generalmente entre 2-5 días después de iniciar el tratamiento con antibióticos para la infección por C. difficile y se debe administrar mediante colonoscopia o sigmoidoscopia flexible. La repetición del TMF puede ser necesaria dependiendo de la respuesta del paciente.2,3</li><li>No se recomienda el uso de TMF convencional en pacientes con colitis ulcerosa o enfermedad de Crohn, excepto en el contexto de ensayos clínicos. La evidencia actual es insuficiente para recomendar estas terapias fuera de un entorno de investigación.2</li><li>De manera similar, la AGA sugiere no utilizar TMF convencional para el tratamiento de la pouchitis o el síndrome de intestino irritable, excepto en el contexto de ensayos clínicos, debido a la muy baja certeza de la evidencia disponible.2</li></ul><ol><li>Uso en adultos hospitalizados por infección grave o fulminante por C. difficile:</li><li>Uso en enfermedad inflamatoria intestinal (colitis ulcerosa y enfermedad de Crohn):</li><li>Uso en reservoritis o pouchitis</li></ol>Conclusiones Las terapias basadas en microbiota fecal son efectivas en la prevención de la recurrencia de infección por C. difficile en pacientes seleccionados, y el TMF convencional se utiliza como tratamiento adyuvante en adultos hospitalizados con infección por C. difficile severa o fulminante que no responden a los antibióticos estándar. No obstante, el TMF no puede recomendarse actualmente para otras afecciones gastrointestinales fuera de ensayos clínicos debido a la limitada evidencia disponible. Se requieren estudios adicionales para evaluar su eficacia en otras enfermedades y para determinar los mejores métodos de administración y seguimiento.2Perlas clínicas<ul><li>La microbiota fecal es el conjunto de microorganismos, principalmente bacterias, que habitan en el intestino humano. </li><li>La microbiota fecal ha cobrado importancia en el tratamiento de diversas enfermedades gastrointestinales, principalmente a través del trasplante de microbiota fecal (TMF). </li><li>El objetivo del trasplante de microbiota fecal es restaurar un equilibrio saludable de microorganismos en el intestino del paciente. Además es un tratamiento prometedor para diversas enfermedades gastrointestinales.</li><li>El TMF utiliza una suspensión de heces de un donante sano para ser introducida en el tracto gastrointestinal del receptor, por vía oral, colonoscopia, enema o sonda nasogástrica.</li><li>La guía sugiere el uso de terapias basadas en microbiota fecal tras completar el tratamiento antibiótico estándar en adultos inmunocompetentes con infección recurrente por C. difficile.</li><li>No se recomienda el uso de TMF convencional en pacientes con colitis ulcerosa o enfermedad de Crohn, excepto en el contexto de ensayos clínicos.</li></ul><figure class="poll" data-id="1179">{ Poll ID: 1179}</figure>

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Guía AGA 2024: microbiota fecal y su papel en el tratamiento de enfermedades gastrointestinales

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