La osteoporosis puede aparecer en etapas tempranas de la vida. La presencia de dolor intenso prolongado en alguna articulación en niños podría indicar alguna variante de esta enfermedad. Por lo tanto, es necesario estar alerta para indicar las pruebas permitentes o derivar a especialista. A continuación, caso clínico de niño de 11 años con múltiples fracturas vertebrales y torácicas que ameritó tratamiento con zoledronato. Después de nueve dosis, el paciente mostró mejoría de síntomas y de resultados de estudios.

Niño de 11 años acude a consulta por presentar dolor en la parte superior de la espalda en los últimos meses, de aparición insidiosa, sin irradiación y que se incrementa de forma progresiva en términos de severidad. El síntoma está relacionado con actividad física y flexión hacia adelante, pero no se evidencia debilidad en las extremidades o rigidez de las articulaciones. No se reportan antecedentes médicos importantes. El paciente visita a médico de familia, quien recomienda analgésicos, fisioterapia y suplementación con calcio y vitamina D. La persistencia de sintomatología conduce a radiografía de columna, que reporta múltiples fracturas vertebrales, por lo que se decide remitir a especialista para valoración. La exploración física muestra altura de 1.41 m, peso de 38 kg y cifosis en la región torácica superior y media. Abdomen protuberante con volumen testicular de 6 mL en ambos lados. Esclerótica y dentición normal sin déficit auditivo ni dimorfismo. El examen neurológico es normal, y las radiografías simples de la columna dorso-lumbar informan múltiples fracturas en vértebras torácicas y lumbares.<h3><figure class="poll" data-id="534">{ Poll ID: 534}</figure></h3>Los paraclínicos reportan valores normales de hemograma, pruebas de función renal, hepática y tiroidea, anticuerpos contra transglutaminasa tisular IgA, calcio total corregido, fosfatasa alcalina (FA), 25-hidroxi vitamina D y hormona paratiroidea intacta. La densitometría ósea (DMO) de cuerpo entero muestra densidad mineral ósea en la columna lumbar de 0.470 g/cm2 (puntaje Z -2.7), fracturas de tercer grado en vértebras torácicas (T7, T9 a T12), y de segundo grado en dos vértebras lumbares (L1 y L5). Por tal razón, se sospecha de osteogénesis imperfecta, pero al realizar estudio genético del gen COL1A1 no se evidencian mutaciones. Ante las manifestaciones clínicas y la baja masa ósea sin etiología subyacente aparente, se diagnostica osteoporosis idiopática juvenil. El tratamiento inicial consiste en zoledronato intravenoso a dosis de 0.05 mg/kg cada seis meses, lo cual reduce el dolor y la movilidad. La terapia total consta de nueve dosis. Luego de cuatro años, las fracturas vertebrales mejoran con desaparición completa de todos los síntomas iniciales. La morfometría vertebral radiológica muestra ausencia de fracturas de segundo y tercer grado identificadas previamente. Dado que las radiografías de la mano informan fusión de todas las epífisis, se conversa con la familia para tomar la decisión de suspender el tratamiento. <h3>Discusión y conclusiones1-3</h3>La osteoporosis es la condición metabólica ósea más frecuente y se caracteriza por pérdida gradual de masa ósea.2 En Colombia, había más de 240 000 personas con osteoporosis en 2018.3 Las pautas recomiendan diagnosticar osteoporosis en niños cuando se evidencia una o más fracturas vertebrales (no traumáticas), o baja DMO con dos o más fracturas de huesos largos en niños de 10 años, o tres o más en pacientes &gt; 19 años. El siguiente paso después de detectar la enfermedad es identificar la causa, que puede ser primaria o secundaria.1 En general, los estudios incluyen paraclínicos como hemograma, velocidad de sedimentación glomerular (VSG), pruebas de función hepática y renal, FA, proteínas totales, 25-hidroxi vitamina D, hormona paratiroidea, calcio sérico total e ionizado y análisis de orina. Igualmente, las radiografías y la DMO son indispensables.1 El tratamiento comprende estilos de vida saludables que involucran ejercicio, exposición a la luz solar y patrones dietéticos saludables con ingesta óptima de calcio durante la infancia. Los medicamentos de primera línea incluyen bisfosfonatos (limitan la reabsorción ósea y previenen la aparición de nuevas fracturas), administrados por vía intravenosa en casos de afectación de vertebras.1 Las dosis y tiempo de tratamiento se ajustan según función y recurrencia de lesiones y optimización de la DMO. Por último, se aconsejan estudios radiográficos de seguimiento incluso cuando la DMO muestra mejoría.1 <h4>Comentario editorial</h4>Las múltiples fracturas en niños deben considerarse signos de alarma para investigar osteoporosis. Cualquier cambio en el crecimiento, deformación, dolor o limitación funcional que reporta el paciente amerita evaluación exhaustiva para detectar afectación e iniciar tratamiento de manera oportuna. En este caso clínico, el primer médico de familia debió estudiar con mayor profundidad al paciente o derivar a especialista para conducta adecuada.

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Caso clínico: signos tempranos de osteoporosis

Caso clínico de niño con dolor intenso en la parte superior de espalda y múltiples fracturas vertebrales y torácicas. Lea más acá. 