Un joven de 23 años acudió a sala de emergencias por dolor en pie izquierdo posterior a caída, luego de que antepié se atascara en una escalera causando hiperflexión dorsal combinada con rotación externa. Al examen físico, se evidenció deformación marcada con edema y dolor en el centro del pie. Se solicitó radiografía, la cual mostró dislocación del hueso navicular. Se decidió suplementar con Tomografía Computarizada de pie y tobillo (figura 1):<figure class="image image_resized" style="width:303px"><img src="https://lh6.googleusercontent.com/CQm6BHYjlyG3xv0n-_XMFitlKMj-EeSs4MbdWw7pUxYrrCtKXzugXYiPpWQ4aoYQwIuGfZVB14jBabtgLM8ca7fiBvfyay5VsuQiVJ4bB95FKxWVSPkmmle3x-Yx-2SAmUmbMSE" /><figcaption>Figura 1: TAC mostró dislocación plantar pura de hueso navicular, sin fractura.</figcaption></figure>Se realizó reducción abierta, debido a falla en reducción por maniobra externa (figura 2):<figure class="image image_resized" style="width:406px"><img src="https://lh6.googleusercontent.com/EIYpwWrcwQQTBVbZwE4p-Bo3iKCBdkF3y-v90SwcEUeDva0AQhdXtKcZAtc5wviUVbJe5Gu2wPlL9-bLgD71__wu-pzURemIj_rtg5HgtSZfgMnU2N_bOvAWpL4pAhxq-RLuVxM" /><figcaption>Figura 2: Imagen intraoperatoria mostrando abordaje dorsomedial.</figcaption></figure>La exploración quirúrgica reveló dislocación de hueso navicular sin fractura, con revestimiento cartilaginoso en la superficie articular intacta. La reducción de la dislocación fue fijada con una aguja de Kirschner talo-naviculo-cuneiforme (figura 3):<figure class="image image_resized" style="width:239px"><img src="https://lh3.googleusercontent.com/5O5Wjhj5X9gKOnsOhp_QiKQZGhjxzzHne6uGB99GJQaZPhprMN4633u1JU0XXsKJdn_1Pkb1Y3PDsbAlwa9CG1m-INd9-Jt-_wHf3A82rPOpPxvQTkJzU8fQDFEtwjFU4NEGQxg" /><figcaption>Figura 3: Control radiológico postoperatorio. </figcaption></figure>Se colocó inmovilización con férula de yeso durante 6 semanas, y rehabilitación funcional -después de retirar clavos con anestesia local- tuvo duración de 5 semanas. Al seguimiento un año después de cirugía, el resultado funcional fue satisfactorio con un pie móvil sin dolor. DISCUSIÓN Y CONCLUSIONES:La dislocación navicular pura es muy rara por su geometría y por la seguridad con la que el hueso navicular se mantiene por un sistema sólido de ligamentos dorsales y plantares, que lo hacen más vulnerable a fracturarse que a dislocarse. Es necesaria una fuerza violenta y severa para causar esta lesión, en la que las fuerzas de  compresión longitudinal de los metatarsianos expulsen al hueso navicular, y los ligamentos dorsales de éste se rompan por la flexión plantar del pie. En este caso clínico, parece ser un desgarro por hiperflexión dorsal del astrágalo del pie causando una ruptura capsuloligamentaria con dislocación plantar sin fractura asociada. La extensión de las lesiones óseas de esta zona pueden estudiarse a través de imágenes radiológicas, especialmente TAC. La resonancia magnética es útil para diagnosticar lesiones ligamentarias y evaluar el riesgo vascular. La reducción abierta usando agujas de Kirschner tiene buenos resultados, incluso con afectación articular extensa. La reducción adecuada puede mejorar el pronóstico, pero el resultado también depende del daño causado por el trauma al cartílago y estructuras adyacentes.La dislocación del hueso navicular es una emergencia traumatológica seria y excepcional, y el manejo quirúrgico temprano con reducción anatómica ofrece buenos resultados.   También le podría interesar: <a href="https://www.docred.com/casos/402c78b8-fractura-tibia-perone-proximal-distal-expuestas-tipo-gustillo" target="_self">Fractura tibia y perone proximal y distal expuestas tipo 1 gustillo.</a>

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 Dislocación pura y aislada del hueso navicular: Un caso excepcional

Un joven de 23 años acude a emergencias por caso clínico de dolor en pie izquierdo posterior a caída Imágenes e intervención revelan un caso excepcional. 