Las recomendaciones actuales para el manejo de pacientes con trauma craneoencefálico, están enfocadas en la evaluación y seguimiento mediante imágenes diagnósticas. En pacientes con trauma leve, pequeñas hemorragias intracraneales (< 10 mm) y un examen neurológico estable, la repetición rutinaria de la tomografía computarizada (TAC) no es necesaria a menos que haya un deterioro neurológico. En estos casos, se recomienda el alta con seguimiento ambulatorio, evitando hospitalizaciones y pruebas innecesarias, y enfocándose en la observación de síntomas que podrían indicar complicaciones (1).

Masculino de 35 años, sin antecedes médicos, acude al servicio de urgencias tras sufrir una caída desde su propia altura. A su llegada, presenta signos vitales normales y una escala de Glasgow de 15/15, sin pérdida de conciencia ni amnesia postraumática. El paciente refiere dolor de cabeza leve pero persistente y no muestra otros síntomas neurológicos. Se realiza una tomografía computarizada (TAC) de cráneo sin contraste, que revela una pequeña hemorragia subdural de 8 mm sin desviación de la línea media ni signos de herniación. No se evidencian otras lesiones intracraneales. 1Manejo InicialEl paciente es admitido para observación debido a la presencia de la hemorragia subdural.  Se monitorean signos vitales y el estado neurológico de manera continua. Durante las primeras 24 horas, el paciente permanece estable, sin signos de deterioro neurológico. 1SeguimientoA las 48 horas, el examen neurológico sigue siendo normal, y el paciente no ha desarrollado nuevos síntomas. Se realiza una TAC de control, que muestra estabilidad de la hemorragia subdural sin cambios en su tamaño ni aparición de nuevas lesiones. Se decide dar de alta al paciente con instrucciones precisas sobre signos de alarma y la recomendación de regresar al servicio de urgencias en caso de presentar algún síntoma neurológico nuevo.1¿Cuál es el siguiente paso más adecuado en la gestión de este paciente?<ol><li>Alta con seguimiento ambulatorio.</li><li>Repetir la TC en 24 horas.</li><li>Realizar una resonancia magnética (RM) cerebral.</li><li>Transferir al paciente a la unidad de cuidados intensivos (UCI) para observación estrecha.</li></ol>Trauma craneoencefálico leve y hemorragia subdural pequeña (&lt; 10 mm)En el contexto de un trauma craneoencefálico leve, la presencia de una pequeña hemorragia subdural, menor de 10 mm, sin desviación de la línea media ni signos de herniación, es un hallazgo común. En estos casos, la mayoría de las hemorragias no progresan y no requieren intervención quirúrgica. La literatura sugiere que estos pacientes tienen un riesgo extremadamente bajo de complicaciones graves, especialmente si su estado neurológico permanece estable.2Evaluación neurológica estableEl paciente presenta un examen neurológico normal, lo que indica que no hay signos de deterioro neurológico. Este es un factor crucial que reduce significativamente la probabilidad de que la hemorragia empeore o que el paciente desarrolle complicaciones que requieran intervención inmediata.3Estabilidad en las imágenes de controlEn el escenario clínico descrito, se realizó una TAC de control que no mostró cambios en el tamaño de la hemorragia ni la aparición de nuevas lesiones. Este hallazgo refuerza la decisión de que el paciente esté en una fase estable de su condición y no requiere más monitoreo hospitalario intensivo.4Manejo ambulatorioLa evidencia científica sugiere que en pacientes con trauma craneoencefálico leve, hemorragia subdural pequeña, y examen neurológico estable, la alta con seguimiento ambulatorio es una opción segura y adecuada. Se recomienda dar instrucciones claras al paciente y a sus familiares sobre los signos de alarma que deberían motivar una nueva consulta al servicio de urgencias.2Instrucciones al pacienteAl dar de alta al paciente, es fundamental proporcionarle instrucciones detalladas sobre los signos de alarma (como confusión, dolor de cabeza severo, vómitos, debilidad focal, convulsiones) y asegurarse de que tenga acceso a atención médica rápida en caso de cualquier cambio en su estado.2¿Cuándo es recomendable realizar una TAC de seguimiento en un paciente con hemorragia subdural menor de 10 mm y examen neurológico estable?<ol><li>Solo si el paciente desarrolla nuevos síntomas neurológicos.</li><li>Siempre dentro de las primeras 24 horas después de la admisión.</li><li>No es necesaria si la primera TC fue normal.</li><li>Dentro de las primeras 72 horas independientemente de la presentación clínica.</li></ol>En el manejo del trauma craneoencefálico leve, es crucial balancear la necesidad de monitoreo continuo con el riesgo de exposición a radiación innecesaria y los costos asociados a pruebas de imagen repetitivas. En pacientes que presentan una hemorragia subdural menor de 10 mm, y que tienen un examen neurológico estable, el riesgo de progresión significativa de la hemorragia es extremadamente bajo.2,4Justificación de la no repetición rutinaria de la TAC<ol><li>Riesgo bajo de complicaciones: estudios han mostrado que en pacientes con pequeñas hemorragias subdurales y sin deterioro neurológico, la posibilidad de que la hemorragia progrese y requiera intervención quirúrgica es mínima. En estos casos, los beneficios de realizar una nueva TAC rutinaria no superan los riesgos asociados, como la exposición innecesaria a radiación y la ansiedad del paciente.2,4</li><li>Evidencia científica: las guías actuales recomiendan la repetición de la TAC solo en casos donde hay un cambio en el estado neurológico del paciente, como la aparición de nuevos síntomas (confusión, deterioro del estado de conciencia, convulsiones). Esto es porque una TAC adicional no modificaría el manejo si el paciente sigue siendo asintomático y neurológicamente estable. 2,4</li><li>Eficiencia en el cuidado de salud: evitar la repetición innecesaria de estudios de imagen ayuda a reducir los costos del cuidado de salud y a optimizar los recursos disponibles sin comprometer la calidad del cuidado del paciente. 2,4</li></ol>Comentario editorialLa recomendación de realizar una nueva TAC solo si hay cambios en el estado neurológico del paciente es la mejor práctica para evitar procedimientos innecesarios, minimizando la exposición a radiación y enfocando los recursos en la observación clínica y el manejo de los síntomas.

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Caso clínico: Trauma craneoencefálico

Las recomendaciones actuales para el manejo de pacientes con trauma craneoencefálico, están enfocadas en la evaluación mediante imágenes diagnósticas. 