La ética médica es una disciplina fundamental para que los profesionales de la salud lleven a cabo su práctica profesional, y en ese camino, protejan los derechos, la salud, la integridad y la calidad de vida de los pacientes. Sin embargo, existen factores sociales, culturales, estructurales e individuales que pueden intervenir en la correcta aplicación de los principios éticos: autonomía, beneficencia, no maleficencia, fidelidad y justicia, por eso los especialistas han impartido algunas recomendaciones para mitigar esta problemática. La ética médica es una disciplina que se basa en 5 principios: autonomía, beneficencia, no maleficencia, fidelidad y justicia, sus objetivos son brindar al médico las capacidades críticas, analíticas y morales para tomar decisiones adecuadas que protejan la vida de los pacientes. Muchos especialistas manifiestan una baja adherencia a los principios éticos de la medicina y desconocen cómo aplicarlos en su día a día. Además, durante el proceso de formación, existen situaciones que impiden que sea correctamente enseñada y aplicada.Algunos de los desafíos que se distinguen en la práctica de la ética en el ejercicio médico, son: <ol><li>Factores cognitivos</li></ol>Se dividen en: <ul><li>Defectos de conocimiento: se presentan cuando los profesionales creen tener los conocimientos éticos para tomar decisiones, pero erróneamente se pueden basar en experiencias o aspectos no científicos. </li><li>Defectos de razonamiento: ocurren cuando el médico no cuenta con las capacidades y habilidades para llevar a cabo un pensamiento crítico y un análisis moral.</li></ul><ol><li>Factores educativos: la falta de una enseñanza adecuada de la ética médica y sus principios, o la falta de métodos, medios y recursos para actuar éticamente, limitan su aprehensión y genera vacíos formativos.</li><li>Factores prácticos: la brecha entre la teoría y la práctica es una línea que divide lo que los profesionales saben, con lo que en realidad hacen. A pesar de contar con los conocimientos éticos, los médicos pueden no aplicarlos.</li><li>Factores estructurales: las fallas en los sistemas de salud son una barrera para la práctica médica ética.</li></ol>Además, en la práctica de la ética médica interfieren factores culturales, creencias religiosas, prácticas espirituales de los profesionales o los pacientes, que pueden diferir en la justificación moral de un tratamiento o procedimiento.La falta de conocimiento y conciencia ética puede reflejarse como afectaciones hacia la salud de los pacientes y limitar la enseñanza estructurada y a largo plazo de sus principios. Para esto, los especialistas imparten las siguientes recomendaciones:<ul><li>Reestructurar los métodos de enseñanza de la ética en el plan de estudios con la finalidad de tener más tiempo para abordarla.</li><li>Destacar la importancia de la ética médica en toda práctica clínica para evitar que los profesionales incurran en errores que generan daños morales y físicos.</li><li>Introducir en la enseñanza modelos de conducta éticos.</li><li>Descubrir los factores internos del conocimiento ético que influyen en la adopción de soluciones apropiadas o inapropiadas.</li><li>Reconocer al paciente como un ser y no como un bien o herramienta, para garantizar una atención de salud pronta y eficaz.</li></ul>La ética médica es fundamental para la buena práctica profesional en los servicios de salud ofrecidos a los pacientes. Abstenerse de la aplicación de sus principios en la toma de decisiones puede generar problemas estructurales, sistemáticos y de salud.Para que prime, en todo momento, los derechos, seguridad y calidad de vida del paciente, todos los especialistas deben basar sus criterios en principios éticos.Comentario editorialSin ética médica, las probabilidades de que incrementen las fallas profesionales son altas, por lo que la aplicación de los principios éticos es fundamental para que se lleve a cabo una práctica profesional integra que proteja la salud de los pacientes.

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El Valor de los Principios Éticos en la Medicina

La ética médica es fundamental para que los profesionales de la salud lleven a cabo su práctica profesional protegiendo la calidad de vida de los pacientes.