La comunidad médica que forma parte de los servicios militares enfrenta diferentes conflictos éticos cuando debe elegir entre ser “médico” o ser “militar” durante una batalla o guerra. En gran parte de los casos, este desafío es mayor para los generalistas que para los especialistas y cirujanos. Parte de los problemas están relacionados con la confidencialidad, el consentimiento, la lealtad dual, la identidad profesional, entre otros. Además, las situaciones varían según el tipo de paciente que deben atender (soldado amigo o enemigo), los recursos y los estándares de tratamiento. 

<p>Los desafíos que enfrentan los <a href="https://www.docred.com/articulos/articulo-medico-medicos-tambien-lloran" target="_self">médicos</a> militares son diversos. Son profesionales que laboran en las fuerzas armadas, aun si no son combatientes, y como galenos, su rol se percibe como humanitario. En vista de que trabajan a nivel internacional, atienden desastres naturales en misiones para mantener la paz o en operaciones de combate; la naturaleza compleja de esta labor plantea elementos éticos únicos.<sup>1</sup> </p><p>Algunos autores consideran que la comunidad médica siempre, en toda circunstancia, debe dar prioridad a las necesidades del paciente como lo indica la ética médica. De acuerdo con la Asociación Médica Mundial, “la ética médica debe permanecer igual en tiempos de paz y de guerra”, pero otros actores plantean que los galenos militares deben tener presente el bien común en la toma de decisiones, es decir, los intereses militares y los aspectos de seguridad nacional.<sup>1</sup></p><h3><strong>Experiencia ética<sup>1</sup> </strong></h3><p>Para evaluar la experiencia ética de los profesionales sanitarios militares es importante plantear ciertas preguntas: ¿experimentan alguna presión por parte de las instituciones militares para subordinar las obligaciones médicas?, ¿cuáles son los desafíos éticos que afrontan durante combates?, ¿sienten que el rol como médicos entra en conflicto con las obligaciones militares?, ¿cómo perciben el papel médico dentro de las entidades militares?</p><p>La mayoría de los clínicos señalan que bajo ninguna circunstancia la autoridad militar puede desviarlos del deber médico hacia un paciente. Las principales tensiones éticas están relacionadas con las restricciones de recursos y diferentes estándares de tratamiento, según si el paciente pertenece al bando amigo o al enemigo. </p><p>Otro aspecto ético reportado es la confidencialidad. La presencia de policías militares o intérpretes durante el diagnóstico de los enfermos lesionados es una situación que obstaculiza la privacidad. No obstante, estos escenarios son justificados por razones prácticas o de seguridad. También se mencionan otros desafíos, incluidos abuso de drogas o alcohol, fatiga de combate, estrés postraumático, etc. En algunos casos, el consentimiento informado también es un desafío, ya que muchas veces el paciente no está en condiciones de darlo. </p><h3><strong>Lealtad dual<sup>1</sup></strong></h3><p>Gran parte de estos profesionales no expresa disconformidades sobre la lealtad a la parte militar y médica; de hecho, están en desacuerdo con la percepción de que los roles militar y médico son difíciles de reconciliar. La misión es brindar atención primaria a los soldados y estar disponibles para garantizar salud, bienestar y protección. </p><p>Sin embargo, autorizar el regreso al combate es un desafío moral que expresa la mayoría. En algunos casos, los soldados quieren regresar a luchar, pero no son aptos y en otras condiciones sucede al contrario. Esto es percibido como una gran responsabilidad moral hacia pacientes y hacia la misión. </p><h3><strong>Identidad profesional<sup>1</sup></strong></h3><p>En cuanto a si los médicos militares priorizan una profesión sobre la otra se evidencian dos vertientes. La primera es que algunos se definen principalmente como médicos, mientras que en segundo lugar se encuentran aquellos que no separan una profesión de la otra. Parece que los tipos de batalla o de ejercicio militar afectan la identificación hacia una de las profesiones más que a la otra.  </p><p>Por otro lado, algunos <strong>estudios</strong> muestran que las mujeres se identifican primero como médicas y en líneas generales esta identidad profesional no varía según especialidad, rango o año de experiencia. </p><h3><strong>Esfera mental<sup>2</sup></strong></h3><p>Los síntomas de trastornos mentales no suelen ser informados por los médicos militares. Las <strong>investigaciones</strong> indican que estos trabajadores tienen creencias estigmatizantes elevadas y actitudes negativas hacia la atención de la salud mental. Se preocupan por los probables efectos negativos y las percepciones de colegas sobre recibir un diagnóstico de enfermedad mental, por lo tanto, prefieren autogestionar.</p><h3><strong>Conflictos armados y misión médica<sup>3</sup></strong></h3><p>Cuando los <strong>médicos</strong> no pertenecen propiamente al servicio militar, pero deben brindar atención en diferentes situaciones como los conflictos armados, estos problemas violentan y perjudican las misiones médicas de diferentes formas.</p><p>Recordemos que la misión médica está constituida por personal sanitario, instalaciones, medios de transporte, equipos y materiales, y se define como el grupo de actividades que realizan los proveedores de salud para cumplir con las obligaciones profesionales. </p><p>Las infracciones reportadas incluyen:</p><ul><li>Violencia contra las instalaciones de salud: portación de armas en centros de salud, conversión de unidad sanitaria en objetivo militar.</li><li>Violencia contra heridos y enfermos: exigir atención médica en inadecuadas condiciones, obligar a revelar información de pacientes, impedir la priorización de la población preferente, transgresión de la dignidad e irrespetar a muertos y familiares. </li><li>Violencia contra personal médico: secuestro, retención, amenaza, violación del secreto profesional, irrespeto a la prioridad y autonomía médica.</li><li>Agresiones contra transporte: uso incorrecto del transporte para acción del conflicto o conversión en objetivo militar.</li></ul><h3><strong>Conclusión<sup>1</sup></strong></h3><p>Sin duda, los médicos militares no son un grupo homogéneo de trabajadores. Es importante diferenciar las tensiones éticas que experimenta cada proveedor, general, especialista, cirujano, mujer, hombre, contextos y tipo de pacientes. Los médicos de cabecera padecen mayores compromisos éticos debido a la naturaleza de su trabajo, pero en general estos dilemas están relacionados con la confidencialidad, los recursos y los estándares en el tratamiento.</p><p>Aunque la identidad profesional depende de cada uno, es esencial abordar la salud mental en este grupo de expertos ya que experimentan fatiga y estrés postraumático, para evitar complicaciones y soluciones catastróficas. </p><h4><strong>Comentario editorial</strong></h4><p>La comunidad médica que decide formar parte de los servicios militares podría enfrentar diferentes desafíos éticos al momento de priorizar la medicina o la norma militar. ¿Qué es más importante, el bien común o el bienestar de cada paciente? ¿El galeno debería actuar bajo sus principios médicos o según las órdenes militares? El rol que desempeña cada uno en una situación de guerra genera incertidumbres y responsabilidad morales y éticas que generan estrés y conflictos internos. Se entiende que las bases médicas deben primar sobre todo lo demás, pero cada médico tiene la autonomía de tomar sus propias decisiones en función del bienestar del paciente.  </p>

Interés general

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Médicos militares: el dilema de priorizar la medicina o el servicio militar

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