El tratamiento para la diabetes mellitus tipo 2 requiere de tratamientos que cumplan metas metabólicas y de otras variables como: presión arterial, perfil lipídico, peso, protección renal y desenlaces cardiovasculares; si bien, los agonistas del receptor de GLP-1 en el mercado han mostrado eficiencia en sus efectos, el acceso al medicamento suele estar acompañado de dificultad económica, alejándolo de la población que lo necesita.

Según un estudio científico de Perelman School of Medicine at the University of Pennsylvania, entre un millón de estadounidenses con diabetes tipo 2, sólo el 7,7% ha sido tratado con agonistas del péptido similar al glucagón tipo 1 (GLP-1) desde octubre de 2015 a junio de 2019. El uso del GLP-1 fue particularmente bajo en 2015, con 3,2% y fue lentamente subiendo hasta 10,7% sobre el año 2019. El mismo estudio evaluó pacientes con diabetes tipo 2 y enfermedad cardiovascular ateroesclerótica para determinar qué pacientes se pueden beneficiar de esta clase de agentes. Las tasas se mostraron mucho más bajas con 2,8% en 2015 y 9,4% en 2019; además, pacientes que padecen de enfermedad de las arterias coronarias preexistente o enfermedad cerebrovascular, en conjunto, tuvieron porcentajes mucho menores. Inclusive, entre más comorbilidades existiesen según el índice de comorbilidad Elixhauser, menores eran las tasas de uso del agonista del receptor de GLP-1. Adicionalmente, se destacó que las minorías étnicas y raciales tenían tasas significativamente menores en comparación con otros pacientes. También, se encontró que las mujeres fueron 22% más elegidas para la prescripción de agonistas GLP-1; además, pacientes cuyos ingresos anuales fuesen superiores a $100,000 USD, tuvieron un rango de uso mayor - entre 7% y 13%- en comparación con pacientes  que reciben ingresos anuales menores a $50,000 USD. El costo del medicamento está completamente ligado a su uso, puesto que el acceso tiene que ver más con el poder adquisitivo que con la existencia del mismo. Es vital que el control de la diabetes mellitus sea temprano y efectivo con el objetivo de prevenir complicaciones crónicas y evitar el efecto nocivo de la memoria metabólica; igualmente, si la diabetes tipo 2 está adecuadamente controlada, se reducen complicaciones crónicas atribuidas a la hiperglucemia crónica tales cómo retinopatía, nefropatía y neuropatía. Cabe resaltar que en Latinoamérica, Colombia ocupa el segundo lugar en número de pacientes  con diabetes mellitus con más de 2 millones de personas y una  prevalencia de 9.6%; siendo la quinta causa de muerte. <h3>Beneficios de los agonistas del receptor de GLP-1 </h3><ul><li>El uso de medicamentos basados en incretinas, ayudan a evitar que la glucosa se eleve, mediante: </li><li>El aumento de la insulina producida por el páncreas. </li><li>La disminución de glucagón. </li><li>La sensación de llenura después de una comida, haciendo que el paciente coma menos. </li><li>Un tránsito más lento desde el estómago hacia los intestinos, disminuyendo el nivel de glucosa en la sangre después de una comida. </li><li>El control metabólico, en otros factores, como presión arterial, perfil lipídico, peso, así como su potencial protección renal y cardiovascular.</li></ul>De este modo, los agonistas de GLP-1 disminuyen las concentraciones de glucagón y la producción endógena de glucosa; es importante la realización de más estudios sobre los beneficios de medicamentos de este tipo en el tratamiento de la diabetes, aunque el número de pacientes con este tratamiento sea limitado y los tiempos de seguimiento sean largos.

Medicina Interna

Farmacología Clínica

Endocrinología

Docred

Tratamiento para Diabetes Tipo 2: la Dificultad de Formular Agonistas del Receptor de GLP-1 

Descubra lo que los agonistas GLP-1 pueden hacer por sus pacientes aquí.