Recientemente, un artículo señaló que el término “ataque isquémico transitorio (AIT)” debe ser reemplazado por accidente cerebrovascular (ACV) menor, ya que existe evidencia sólida que respalda la presencia de infarto y lesión cerebral posterior al AIT. Debido al ritmo extremo de pérdida de neuronas, sinapsis y fibras mielínicas durante cada minuto de isquemia, el desarrollo de daño tisular cerebral duradero es más probable. Esto significa que la definición actual de los AIT que señala que no hay lesión cerebral permanente debe ser reevaluada.

El AIT ha sido un término clínico útil, aunque el acuerdo sobre el diagnóstico para casos individuales ha estado lejos de ser perfecto, incluso entre los expertos. La utilidad del diagnóstico ha disminuido con las mejoras en las imágenes cerebrales y una comprensión profunda de la historia natural de la isquemia cerebral aguda.  El concepto actual de AIT se caracteriza por un episodio isquémico en el que los síntomas son transitorios y no se asocian con una lesión cerebral. Pero la evidencia reciente sugiere que tales episodios no ocurren o son extremadamente raros y que la lesión cerebral casi siempre sucede durante estos eventos. En consecuencia, un artículo publicado en JAMA señaló la posibilidad de reevaluar la solidez conceptual y la utilidad del término AIT.  <h3>¿Ataque isquémico transitorio o accidente cerebrovascular menor? </h3>En la década de los setenta, el comité de los Institutos Nacionales de Salud de EE. UU. (NIH) definió los AIT como: “Episodios de disfunción cerebral temporal y focal de origen vascular, de inicio rápido (sin síntomas a síntomas máximos en menos de 5 minutos y generalmente menos de un minuto), que comúnmente dura de 2 a 15 minutos, pero ocasionalmente dura hasta un día (24 horas)”.  Esta definición se construyó para proporcionar una base común y así distinguir a los pacientes que probablemente padecían un infarto cerebral subyacente (ACV isquémico) y aquellos que probablemente no lo padecían.  A medida que la resonancia magnética nuclear (RMN) se usaba con más frecuencia en la década de los noventa, quedó claro que muchos pacientes que experimentaron un AIT tenían evidencia de infarto en las imágenes cerebrales. Por tal razón, un grupo de neurólogos consideró estos conceptos y propuso una nueva definición que se publicó a mediados del 2002 (2). Además, muchos profesionales y el público tienden a considerar que los AIT son benignos, mientras que los ACV son graves. De esta forma, el grupo de expertos señaló que esta percepción con respecto a los AIT era incorrecta y que ambas afecciones están involucradas en la isquemia cerebral, de hecho, son marcadores de discapacidad actual o inminente y riesgo de muerte.  En 2009, la American Heart Association y la American Stroke Association's Stroke Council emitieron una declaración científica que se basó en la definición final de AIT: “Un episodio transitorio de disfunción neurológica causado por isquemia focal en el cerebro, la médula espinal o la retina, sin infarto agudo”.  Sin embargo, los avances en la obtención de imágenes han hecho insostenible la opinión de que la isquemia cerebral que causa síntomas transitorios a menudo no produzca ninguna lesión cerebral. Además, los estudios histopatológicos han demostrado que incluso cuando no se produce un infarto tisular franco, sí lo hace la deserción neuronal.  Dado el ritmo extremo de pérdida de neuronas, sinapsis y fibras mielínicas durante cada minuto de isquemia, es probable que la preponderancia de los eventos definidos como AIT, incluso bajo la definición moderna, estén asociados con daño tisular cerebral duradero, siempre que el médico puede estar seguro de que el evento clínico se debió a isquemia transitoria o infarto, en lugar de una imitación de AIT (p. ej., convulsión focal, aura de migraña, alteración metabólica o síncope). Según la definición de los AIT de 2009, esto significaría que los episodios breves de isquemia cerebral que ocurren lo suficientemente rápido como para causar solo síntomas transitorios y ninguna lesión cerebral permanente, no existen.  Todos los eventos isquémicos cerebrales focales sintomáticos deben considerarse infartos cerebrales, que pueden ser menores, moderados, graves o fatales, según las puntuaciones de la escala de ACV de los (NIH); y pueden o no ser detectados al utilizar técnicas de imagen modernas. Después de todo, las descripciones anteriores de que "los AIT son miniaccidentes cerebrovasculares" eran correctas.  En otras palabras, los AIT son ACV isquémicos menores y deberían denominarse así y el término AIT debería retirarse. La utilidad de distinguir el AIT del ACV menor sigue sin estar clara, ya que ambas afecciones tienen un alto riesgo de isquemia cerebral futura, responden a tratamientos similares y pueden tener efectos parecidos en el paciente.  <h3>Conclusión </h3>Los autores del artículo señalan que es hora de adoptar el término síndrome cerebrovascular isquémico agudo sugerido anteriormente y retirar el de AIT. Así como los cardiólogos han abordado la evolución de su redefinición de síndrome coronario agudo (SCA), los neurólogos deberían abordar la evolución de su redefinición del síndrome cerebrovascular isquémico agudo.

Neurología

Medicina Interna

Medicina General

Docred

¿Es Hora de Retirar el Concepto de Ataque Isquémico Transitorio?

El ataque isquémico transitorio es un término que debe ser reevaluado debido a sus implicaciones clínicas. Descubra más acá. 