La prueba de fuerza de agarre específica (Grip) es un método seguro y confiable para evaluar de forma funcional y unilateral, la potencia muscular de las extremidades superiores en adolescentes de 11 a 19 años, así lo indicó un estudio publicado hace poco por Plos One. Además, es la primera investigación que incluyó la evaluación de la fuerza del segmento mano-dedo. La capacidad de los humanos para manipular objetos es única. Los dedos, junto con la capacidad de adaptarse a diversas texturas y superficies, pueden ejercer diferentes niveles de fuerza, así como la del segmento mano-dedo llamada fuerza de prensión. Esta se reconoce como un predictor de riesgo de varias patologías, incluidas el desequilibrio del estado nutricional, el nivel y la calidad de la masa muscular, e incluso alteraciones psicosociales como la ansiedad. De hecho, la fuerza de agarre que se evalúa con la prueba de agarre es un indicador fiable de la función física y el estado de salud de la población. Para esto se han utilizado varios instrumentos de medición como la resistencia del segmento mano-dedo, que va desde dinamómetros hidráulicos hasta dinamómetros isocinéticos.  Para poder determinar la potencia muscular de dicho segmento, un estudio (1) publicado en los últimos días por Plos One evaluó la prueba Grip (prueba específica de fuerza de agarre) para determinar su validez y confiabilidad en adolescentes de 11 a 19 años.  La muestra estuvo constituida por 21 adolescentes físicamente activos de ambos sexos que voluntariamente aceptaron formar parte de la investigación.  Antes de comenzar la prueba, se realizó un calentamiento estandarizado de 5 minutos que incluyó la movilización activa de las articulaciones de la muñeca y los dedos. Cada participante se colocó de pie, mirando hacia adelante y lateralmente a los soportes. Estos sujetaron la mancuerna con la mano entre las articulaciones interfalángicas de los dedos medio y anular y las distales de los dedos índice y meñique para ser evaluados. Para la ejecución de la prueba, los adolescentes debían relajar los hombros, extender el codo de la extremidad a evaluar a 180° y colocar la muñeca en una posición neutral. El protocolo consideró series con cargas incrementales, estas fueron: 1 kg, 2 kg, 3, kg, 4 kg, 5 kg, 6 kg, 7 kg, 8 kg, 9 kg, y 10 kg, siempre en ese orden y la pausa entre series fue de 30 segundos.  Los resultados demostraron que la prueba Grip permite la determinación de la fuerza muscular de agarre de forma unilateral y funcional, ya que los participantes fueron evaluados de pie y con un agarre manual que simula las actividades de la vida diaria. Este es el primer estudio desarrollado para evaluar el poder de la musculatura de agarre de forma unilateral en adolescentes de 11 a 19 años, que incluyó la potencia muscular del segmento articulación mano-dedo de ambas extremidades; y junto con la fuerza (valorada por el test Handgrip) y la masa muscular (valorada por antropometría), permitió obtener una valoración específica y precisa de la calidad muscular de las extremidades superiores, concretamente de dicho segmento.  Asimismo, los autores señalaron que, aunque la evidencia muestra la existencia de otras pruebas validadas para evaluar la potencia de las extremidades superiores, estas estiman la capacidad física de forma bilateral.   De igual forma, se evidenció que esta prueba tiene un alto grado de confiabilidad tanto para el segmento derecho como para el izquierdo. Estos datos de fiabilidad añaden mayor consistencia para estudiar la fuerza de la musculatura de agarre, que otras pruebas utilizadas con el mismo fin. Por último, los autores recomiendan que para los formadores que utilicen la prueba Grip considerar los siguientes aspectos:  <ul><li>Antes del procedimiento, los participantes deben tener un período de familiarización. </li><li>Educar sobre los errores recurrentes durante la ejecución, como la inclusión de otros segmentos articulares como el hombro, el codo y la muñeca.  </li><li>Considerar el nivel de condición física de los participantes ya que un mal estado físico podría afectar la confiabilidad de la prueba.  </li></ul>Comentario editorial. La prueba de agarre potenciada (Grip) es una mejor herramienta para estudiar la fuerza muscular de las extremidades superiores en adolescentes que otras pruebas funcionales, ya que evalúa de forma funcional y unilateral cada extremidad, simulando las actividades de la vida diaria ¿Consideraría usted emplear esta prueba?  También le puede interesar: <a href="https://www.docred.com/articulos/ar-adaptaciones-musculo-esqueletico-dermatomiositis-juvenil" target="_self">Adaptaciones del músculo esquelético en la dermatomiositis juvenil</a>

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Nuevo método confiable para evaluar la fuerza muscular en adolescentes

Una nueva prueba de fuerza de agarre para evaluar la potencia muscular en adolescentes. Lea más acá.