La osteoporosis es el principal factor de riesgo de fracturas en mujeres posmenopáusicas, con importantes consecuencias clínicas y socioeconómicas. Los análisis históricos en las tasas de fractura de cadera, por ejemplo, sugieren que la brecha entre el diagnóstico y tratamiento de la osteoporosis está empeorando, en vista de los efectos adversos (EA) poco comunes pero graves de terapias como los bifosfonatos. Entonces ¿cómo identificar a las pacientes que más se benefician del tratamiento de la osteoporosis sin que esto represente un aumento del riesgo de EA?

La osteoporosis es un fenómeno común, quizá como consecuencia natural del envejecimiento en las mujeres posmenopáusicas.1,2 Su importancia clínica radica en que <a href="https://www.docred.com/noticias/noticia-medica-altas-dosis-estatinas-peor-calidad-osea" target="_self">es el principal factor de riesgo de fracturas de cadera</a>, muñeca y vértebras en esta población, con gran repercusión en los resultados clínicos y costos derivados de la atención.1-3Se estima que el riesgo acumulado de fracturarse, en una mujer &gt; 50 años con osteoporosis, llega a ser de 60%.2 Estas fracturas osteoporóticas se asocian a deformidad física y dolor crónico, limitación de la deambulación, mayor dependencia funcional y, por ende, disminución de la calidad de vida.1-3No obstante, la osteoporosis aún es una entidad subdiagnosticada y subtratada, incluso entre mujeres que ya han sufrido una fractura de cadera.1 Los análisis históricos en las tasas de fractura de cadera sugieren que esta brecha está empeorando, en vista (al menos en parte) de los efectos adversos (EA) poco comunes pero graves de las opciones terapéuticas.1<h3>¿Cuál es el abordaje terapéutico de la osteoporosis? Estado del arte</h3>Prevenir y tratar la osteoporosis puede resultar desafiante debido a su conocida etiología multifactorial.2 Varias intervenciones farmacéuticas, con diferentes mecanismos, han resultado efectivas para reducir el riesgo de fracturas en mujeres posmenopáusicas con osteoporosis.2 Sin embargo, en la actualidad, la mayoría de los medicamentos disponibles son agentes antirresortivos, cuyo objetivo es disminuir el recambio óseo.2Esta categoría incluye los bifosfonatos, que representan la mayoría de las prescripciones para osteoporosis y parecen ser la intervención de elección en mujeres mayores (&gt; 60 años).2,3 Ensayos clínicos aleatorizados (ECA) han demostrado que varios de estos medicamentos (p. ej., alendronato, risedronato y ácido zoledrónico), al inhibir la remodelación ósea, reducen el riesgo de fracturas.1,3<h4>¿Cuáles son los eventos adversos asociados?</h4>Aunque estos ECA y la experiencia clínica indican que son moléculas seguras, muchos pacientes han informado dolor muscular y EA gastrointestinales, como reflujo e irritación esofágica, mientras recibían bifosfonatos orales.1,3 De hecho, se recomienda a quienes reciban alendronato y risedronato permanecer erguidos durante ~30 minutos después de la ingestión para reducir el riesgo de esofagitis.1El ácido zoledrónico intravenoso se asocia a una reacción caracterizada por fiebre, cefalea y mialgias en hasta 40% de los pacientes después de recibir la primera dosis.1 Por tanto, si bien son una intervención comprobada <a href="https://www.docred.com/videos/vi-docred-conversa-menopausia-segunda-primavera-femenina-dr-francisco-espinel" target="_self">para prevenir fracturas en muchas mujeres posmenopáusicas</a>, los bifosfonatos se relacionan con un riesgo de daño inmediato.1<h4>Así se estima el riesgo-beneficio</h4>Parece claro, entonces, que el tratamiento con bisfosfonatos tiene más éxito cuando está dirigido a las pacientes con más chance de beneficiarse.1 Para identificarlas, una estrategia útil es comparar la esperanza de vida con el tiempo hasta el beneficio (THB),1 definido como el periodo entre el inicio de una intervención (cuando es más probable que se produzcan daños) y el momento en que aparecen sus beneficios.1En casos en los que la esperanza de vida del paciente sea más corta que la THB, las intervenciones pueden exponer quizás innecesariamente a los adultos mayores a riesgos y complicaciones inmediatas, con poca probabilidad de vivir el tiempo suficiente como para experimentar los beneficios esperados.1Como la edad y la multimorbilidad son factores de riesgo importantes asociados a las fracturas osteoporóticas, estimar el THB del tratamiento con bisfosfonatos es importante para tomar decisiones clínicas.1 Un metanálisis de 10 ECA encontró que 100 mujeres posmenopáusicas con osteoporosis necesitarían tratamiento durante 12.4 meses (THB) para evitar una fractura no vertebral (figura 1).1<figure class="image"><img src="https://res.cloudinary.com/docred/image/upload/t_optimization/v1701805442/Figura_1_Diferencia_en_la_incidencia_de_fracturas_a_lo_largo_del_tiempo_con_el_tratamiento_con_bifosfonatos_2275034692.webp" /></figure><h3>¿Por qué es esto útil?</h3>Estos hallazgos sugieren que los bisfosfonatos tienen más probabilidades de beneficiar (prevenir el riesgo de fractura sin aumentar el riesgo de EA graves) a las mujeres posmenopáusicas con osteoporosis y esperanza de vida &gt; 1 año.1, 2 Es decir, los beneficios a corto plazo probablemente superan los daños a corto plazo asociados al tratamiento para la mayoría de las pacientes.1No obstante, los autores recomiendan individualizar y discutir con las pacientes las decisiones sobre su tratamiento con bifosfonatos:1, 2<ul><li>Para algunas mujeres, estos beneficios “retardados” (disminución del riesgo de fracturas) pueden ser más importantes que los riesgos inmediatos (por lo general, síntomas gastrointestinales),</li><li>Mientras tanto, para otras, el hecho de experimentar EA inmediatos, a cambio de una probabilidad de uno entre 100 de obtener beneficios un año después, puede llevarlas a renunciar al tratamiento.</li></ul><h3>En conclusión</h3>En vista de que la mayoría de las mujeres posmenopáusicas tienen una esperanza de vida sustancialmente mayor de un año, los bisfosfonatos podrían ser beneficiosos para la mayoría de las mujeres mayores con osteoporosis.1-3 Dada la incertidumbre respecto de los efectos adversos y la heterogeneidad en la esperanza de vida, <a href="https://www.docred.com/noticias/noticia-medica-hormonoterapia-salud-osea-posmenopausia" target="_self">es importante que los médicos tomen estas decisiones</a> basados en:1-3<ul><li>riesgo individual de cada paciente (historial médico y densidad mineral ósea),</li><li>valores y preferencias de la paciente.</li></ul><figure class="poll" data-id="890">{ Poll ID: 890}</figure>Comentario editorialLos médicos tratantes pueden y deben equilibrar los beneficios y riesgos de la terapia antiosteoporótica, al incorporar las preferencias de cada paciente. Para las demás partes interesadas (tomadores de decisiones, industria farmacéutica, entre otros), perfeccionar la comunicación con evidencia científica para los diferentes niveles de riesgo optimizaría la asignación de recursos y, por ende, los resultados en salud de las mujeres posmenopáusicas.

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