El dolor abdominal agudo es un motivo de consulta frecuente. Al tratarse de un síntoma que puede ser secundario a una condición que pone en peligro la vida del paciente, es importante saber actuar rápidamente. Lee aquí como puedes abordar a los pacientes con este síntoma.

<h3>Anamnesis: Seis preguntas útiles</h3>El dolor abdominal puede tener causas sistémicas, abdominales y extra abdominales. Para un interrogatorio estructurado, las siguientes preguntas pueden ser útiles: <ul><li>¿Cuándo empezó el dolor?</li><li>¿Cómo se ha comportado a lo largo del tiempo?</li><li>¿Dónde se localiza el dolor actualmente y ha cambiado en el tiempo?</li><li>¿Cómo es el dolor (tipo presión, punzadas, cólico, duración, irradiación)?</li><li>¿Qué pasó justo antes del inicio del dolor? ¿Presentó una caída o accidente?</li><li>¿Ha tenido cirugías o algún tratamiento reciente?</li></ul><h3>Tres interrogatorios sugestivos:</h3>Apendicitis aguda: inicialmente dolor periumbilical o epigástrico sordo; después de un periodo asintomático el paciente refiere punzadas en el flanco derecho.Infarto mesentérico: Dolor muy intenso de inicio súbito con mejoría espontánea. Los paraclínicos suelen ser normales inicialmente. Posteriormente, con aumento progresivo de la irritación peritoneal asociado al deterioro del estado general hasta el estado de shock.Perforación intestinal: Dolor muy intenso al inicio con una disminución posterior de la intensidad.<h3>Examen físico y laboratorios:</h3>A través de la palpación se puede localizar el punto del máximo dolor y estimar la gravedad de la irritación peritoneal. Información adicional proporciona la inspección, auscultación y la percusión del abdomen, al igual que la revisión del tórax, extremidades y de la cavidad oral. El examen ginecológico es de gran valor en mujeres jóvenes con dolor abdominal.Se debe considerar la solicitud de los siguientes paraclínicos, según esta guía de práctica clínica: <ul><li>Hemograma</li><li>Proteína C reactiva</li><li>Lipasa</li><li>Marcadores de la función hepática (ALT, AST, GGT, bilirrubina, fosfatasa alcalina)</li><li>Lactato deshidrogenasa</li><li>Tiempos de coagulación (INR, PTT)</li><li>Gases arteriales incluyendo lactato</li><li>Creatinina, BUN</li><li>Electrolitos</li><li>Pruebas de compatibilidad pretransfusionales</li><li>TSH</li><li>Uroanálisis</li><li>Troponina (en caso de dolor en el abdomen superior)</li><li>Beta-HCG en mujeres en edad fértil </li><li>Hemocultivos en caso de sospechar sepsis</li></ul>¡Tener en cuenta cursos atípicos! La elevación de leucocitos (en horas) y de la PCR (en 12-24h) puede ser tardía. Por lo que en el caso de una sintomatología de inicio reciente con marcadores inflamatorios normales no se puede descartar una condición potencialmente mortal. En pacientes de edad avanzada, la elevación de leucocitos puede estar ausente por completo. Además, en estos pacientes, el dolor abdominal en el cuadrante superior derecho puede estar ausente a pesar de una colecistitis aguda. <figure class="poll" data-id="74">{ Poll ID: 74}</figure><h3>Imágenes diagnósticas: Ecografía antes de la TAC</h3>La ecografía sirve para observar la presencia de aire o líquido, para detectar órganos huecos dilatados, para evaluar el peristaltismo intestinal y para visualizar la región alrededor del dolor. Importante: En caso de una inflamación aguda se pueden observar cambios ecográficos dentro de pocas horas. Aunque la tomografía axial computarizada es el método de mayor valor diagnóstico, debido a la radiación y otros riesgos asociados, este examen solo debe ser realizado si no se ha llegado a un diagnóstico a través de la ecografía. Excepción: Pacientes en estado crítico que requieren un diagnóstico inmediato. En caso de que las imágenes no orienten hacia ningún diagnóstico específico, la laparoscopia diagnóstica puede ser la conducta indicada teniendo en cuenta la clínica del paciente. Además, en la mayoría de los casos la laparoscopia permite resolver la causa. La radiografía de tórax en dos planos con el paciente de pie se debería realizar en todos los casos de dolor localizado en el abdomen superior, con el fin de descartar una neumonía de los lóbulos basales. <h3>Terapia: Estabilizar la volemia e iniciar analgesia</h3>Independientemente del diagnóstico, todos los pacientes deben ser estrictamente monitoreados, recibir analgesia y expansores de volumen con el fin de estabilizar la volemia. Adicionalmente, los pacientes deben estar en ayuno hasta establecer el diagnóstico definitivo. En caso de vómito y sospecha de íleo, una sonda nasogástrica puede mejorar los síntomas del paciente. ¿Sospecha de sepsis? Iniciar la terapia rápidamente.Si un paciente con abdomen agudo presenta signos de sepsis, se debe iniciar su respectivo manejo cuyos pilares principales son el control del foco abdominal, la estabilización de la circulación y la terapia antimicrobiana oportuna. <h3>Diagnóstico más frecuente: Dolor abdominal inespecífico </h3>Los diagnósticos comunes del dolor abdominal incluyen apendicitis, colecistitis, íleo y condiciones ginecológicas. Sin embargo, en hasta un tercio de los casos, se trata de dolor abdominal inespecífico, en el cual no se puede establecer un diagnóstico definitivo.

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Abdomen agudo: Cómo enfocar al paciente

En esta guía de práctica clínica encontrará las recomendaciones de tratamiento o manejo del dolor abdominal agudo como signo de alarma en pacientes.